Carapari: Condenan a sujeto que violó a su hija desde los 8 años
Luego de un proceso penal de más de dos años, esta semana concluyó en Caraparí el juicio oral en el que Julio Z.L., de 46 años de edad, fue declarado culpable por el delito de violación agravada en contra de su hija 11. Por ese delito el Tribunal de Sentencia Penal, Anticorrupción, Contra la Violencia hacia las Mujeres Primero de Yacuiba lo condenó a 25 años de cárcel.
De acuerdo a los datos oficiales del sistema de Justicia, en el país cada día hay un promedio de 16 menores de edad que sufren algún tipo de agresión sexual. Los delitos más recurrentes son el abuso, la violación y estupro.
El fiscal de materia Isac Adali Castillo explicó que el caso ocurrió en una comunidad del área rural y se remonta al 15 de mayo de 2022 cuando la Defensoría de la Niñez y Adolescencia (DNA) de Caraparí tomó contacto con la madre de la menor para indagar sobre la sospecha de una posible agresión sexual.
Luego un equipo multidisciplinario realizó una entrevista a la menor, quien declaró que su padre la había violado hace poco. Sin embargo, no había sido la única agresión. Durante la investigación se descubrió que las agresiones comenzaron con abuso y toques impúdicos cuando ella tenía ocho años, pero las vejaciones se fueron agravando paulatinamente.
Sobre el caso la fiscal departamental, Sandra Gutiérrez, señaló que a lo largo de la investigación se logró recolectar suficientes pruebas de que el hombre era culpable del delito de violación con el agravante de que la víctima fue su hija menor de edad.
“En este caso se demostró la autoría del sindicado toda vez que se presentaron elementos contundentes como el registro del lugar de los hechos, declaración de la víctima que identifica a su padre como su agresor, además que el hecho se registró en varias ocasiones, el certificado médico forense que describe las lesiones que presenta la afectada, entre otras”, señaló.
Los vocales del Tribunal emitieron la sentencia de 25 años, la cual el sindicado deberá cumplir en el Centro de Readaptación Productiva de El Palmar, Yacuiba.
Una evaluación psicosocial determinó que la menor de edad no se encontraba segura bajo la tutela familiar y se la ingresó a un centro de acogida.
Fuente El País
